El Barcelona se lleva una importantísima victoria en Ipurúa por 0-2 ante el Éibar en un partido en el que los armeros le pusieron las cosas muy complicadas a los azulgranas.
Desde el principio, el equipo eibarrés demostró, con un juego directo y totalmente vertical, que su intención era la de ir a por el partido, aunque Ter Stegen salvó sus ocasiones al inicio. Tuvo que aparecer Messi, el mejor del partido, para encontrar a Luis Suárez en una jugada en la que el charrúa anotaría a puerta vacía tras regatear a Dmitrovic.
En la segunda mitad, siguieron las ocasiones de uno y otro equipo hasta que Orellana fue expulsado por golpear el balón en una jugada muy protestada que también acabó con Mendilíbar fuera del partido. A poco del final, Jordi Alba cazaría un balón suelto para sentenciar el partido.