El Real Madrid, a pesar de llevar solo 12 jornadas, ha ido cambiando mucho en lo que llevamos de temporada. Ha habido variaciones de sistemas, muchas rotaciones e incluso un cambio de entrenador. Lopetegui manejaba a su equipo dependiendo del rival. Podía salir con un 4-3-3 un 4-4-2 o un 4-2-3-1. Pero desde la llegada de Santiago Solari, se ha asentado el 4-3-3, un esquema conocido por los jugadores blancos y, por los jugadores que tiene, al que mejor se adapta el conjunto del Paseo de la Castellana.
En la portería madridista ha habido muchas dudas. Keylor ha sido el portero titular del Real Madrid desde que llegó al equipo en 2014. El fichaje de Courtois hizo que el tico se planteara una salida, pero decidió quedarse. Empezó de titular con Lopetegui, tanto en LaLiga como en Champions. Finalmente, el belga se impuso al exportero del Levante y se hizo fijo en el once. De hecho, con Solari, Navas solo ha jugado el partido de Copa del Rey.
Las bajas en defensa han provocado que no haya una línea defensiva fija. El lateral derecho ha sido donde más ha sufrido el Real Madrid. Las lesiones de Carvajal y Odriozola han llevado a Nacho a ser el lateral que más minutos ha jugado. En el centro de la zaga hay menos dudad. La pareja Ramos-Varane parece innegociable para Solari. Aunque últimamente Reguilón ha tenido más protagonismo, el lateral zurdo titular sigue siendo Marcelo.
El centro del campo también ha sufrido muchas rotaciones, sobre todo en la etapa de Lopetegui. El entrenador vasco no daba con la clave y muchos de los jugadores no estaban en su mejor nivel. Con Solari, parece que Casemiro, Kroos y Modric son indiscutible. Isco ha sido el gran afectado con la llegada del argentino y Ceballos sigue siendo el suplente de confianza.
En la delantera es donde más variantes está presentado Santiago Solari. A Marcos Asensio le está pasando lo mismo que ha Isco. En estos últimos partidos, los minutos jugados por el balear han caído empicados. Aún así sigue siendo una de las referencias de la delantera blanca junto a Benzema y a Gareth Bale. El francés es el más reforzado con el cambio de entrenador. Desde la llegada del nuevo míster, Karim Benzema ha recuperado su mejor nivel. Cuatro goles en cuatro partidos.
