Desde que ascendiera en la temporada 2016/2017, el Getafe está siendo un fijo en la zona media de la tabla. Es de esos equipos “molestos”, que parecen fáciles pero realmente te complican los partidos. Juega cerrado, repliega muy bien y sale rápido al ataque. Con su esquema de 4-4-2, se muestra como muy reforzado en el centro del campo y es capaz de salir con rapidez al contraataque, aprovechando la velocidad de sus atacantes. Prácticamente son los mismo jugadores que la temporada pasada. Se conocen muy bien y se entienden a la perfección.
En la portería se ha dado uno de los pocos cambios que hay en el once. La baja de Vicente Guaita parecía más importante de lo que realmente está siendo. David Soria salió del Sevilla FC en busca de minutos y confianza. Bordalás le ha dado lo que necesitaba. No se ha perdido ni un solo minuto en lo que va de temporada y ya le ha dado puntos a su equipo.
La línea defensiva del Getafe parece fija. Damián Suárez; que es el otro que lo ha jugado todo; Bruno, Djene y Antunes se reparten la mayoría de los minutos en estas primeras 12 jornadas. Cierto es que el banquillo azulón no tiene gran profundidad, sobre todo en defensa.
En el centro del campo es donde más rotaciones realiza Bordalás. A pesar de todo, hay jugadores que son más fijos que otros. Doble pivote para Mauro Arambarri y Nemanja Maksimovic. El serbio es indiscutible desde que llegó del Valencia. Bandas para Portillo, que suele tirar más al centro, y Amath Ndiaye. En muchas ocasiones, el entrenador alicantino ha apostado por el doble lateral en banda derecha, dando entrada a Foulquier por Portillo.
Arriba es donde menos dudas existen. Jorge Molina sigue en un gran estado de forma a pesar de su edad y Ángel Rodríguez no parece que vaya a salir del once. También se le ha dado oportunidades a Jaime Mata, que ya sabe lo que es marcar de azulón. El gran sacrificado es Sergi Guardiola, que apenas ha jugado en tres partidos.
