El Sevilla confirmó este jueves que Vincenzo Montella ocupará esta temporada el banquillo del conjunto hispalense. El técnico italiano estará acompañado en la dirección del equipo hispalense de un viejo conocido de la afición sevillista, Maresca. Tras las primeras 17 jornadas de competición, el entrenador transalpino sustituye a un Eduardo Berizzo que a pesar de los aceptables resultados obtenidos, no ha logrado convencer en cuanto a juego. ¿Pero qué estilo de juego caracteriza al ex entrenador del Milan?
Vincenzo Montella triunfó como entrenador dirigiendo en la Fiorentina a una plantilla repleta de talento y cuyo juego se caracterizaba, desde el esquema 4-3-3, por la electricidad y la velocidad que imprimían al juego sus hombres de ataque apoyada por el fútbol control que proponían los centrocampistas de aquel equipo.
Ya con su paso a la Sampdoria y el posterior fichaje por el Milan, las cosas no le irían tan bien y se vería obligado a reinventarse apostando por distintos esquemas como el 3-5-2, el 4-3-1-2 o el 3-4-2-1 que utilizaba en sus últimos días como entrenador del conjunto rossonero.
Teniendo en cuenta que a Montella se le exigirán resultados inmediatos no se espera que lleve a cabo una inmediata revolución ni en cuanto a jugadores ni en cuanto a esquema con respecto a lo llevado a cabo por Eduardo Berizzo (un 4-2-3-1 que puede mutar en 4-3-3).
Aun así, uno de los principales motivos por los que Berizzo no sigue ocupando el banquillo sevillista, es por el juego insulso que llevaba a cabo su equipo durante el primer tercio de la temporada, por lo que Montella poco a poco tratará de embellecer sus planteamientos para mantener satisfechos a directiva y afición.
Éver Banega y Steven N’Zonzi -en el caso de que el técnico italiano logre recuperar al francés para la causa- serán por tanto jugadores de vital importancia tal y como lo eran hasta ahora. Son dos de los futbolistas más diferenciales de la plantilla sevillista, y su papel dentro del esquema de Montella se podría asemejar a los ejercidos por Borja Valero o Matías Vecino en su Fiorentina.
Por otra parte, se espera que Luis Muriel y Joaquín Correa, con quienes coincidió en la Sampdoria tomen mayor protagonismo, ya que el entrenador italiano sabe cuándo y cómo puede apretarles las tuercas y qué rendimiento le pueden dar al equipo. Además, Franco Vázquez también tiene pasado común con Maresca, por lo que el italoargentino podría consolidarse también como primera opción ejerciendo el rol de futbolista de último pase, de segundo punta.
Habrá que esperar para ver cómo se asientan los eventuales fichajes que puedan cerrarse para reforzar el equipo y si logran desbancar a alguno de los teóricos titulares, y también se tendrá que esperar para ver qué posición ocupa Mercado, ya que situado en el lateral diestro, fue criticado por sus prestaciones y que podría volver al puesto de central como ya lo hiciera la pasada temporada con Sampaoli, ya sea en esta ocasión formando con defensa de tres o de cuatro, tal y como decida Montella.
En definitiva, el nuevo técnico del Sevilla ha demostrado a lo largo de su trayectoria como entrenador ser un director de juego con al menos la voluntad de adaptarse a las cualidades de su plantilla -y no al revés- siempre en busca de su mejor rendimiento colectivo, pero si los resultados progresivamente le acompañan, buscará adaptar a sus jugadores a sus planteamientos disponiendo sobre el campo un 4-3-3 en el que el control de sus centrocampistas y la rapidez de sus atacantes se conviertan en una clara seña de identidad.
